En esta entrada te hablaremos un poco sobre la magnífica historia de Cuenca, como se constituyó su casco antiguo y qué elementos podemos ver presentes aún en nuestros días. Verás como elegir un hotel en esta zona es una de las mejores decisiones que podrás tomar.

Todos sabemos que Cuenca es única, por su localización, su naturaleza, su historia... desde hace muchos años, es considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Si no la has visitado aún, igual te preguntas porqué. Su casco antiguo (parte antigua de la ciudad) conserva elementos arquitectónicos de épocas pasadas que no creerías.

Cuando eliges un hotel en el casco antiguo de Cuenca te aseguro que has tomado la decisión correcta, pero si encima lo eliges en el centro histórico de la ciudad, la decisión es aún más correcta. Al decidir visitar esta maravillosa ciudad rodeada de historia antigua y edificios sorprendentes, decides pasar tus vacaciones conociendo uno de los mejores rincones de España. Seguro que eres una de esas personas que buscan nutrirse de la cultura del país y llevarte en tu memoria ese trocito de cada lugar al que viajas.

Desde la Catedral de Santa María y San Julián de la época de Alfonso VIII hasta las casas colgadas del siglo XV, pasando por el Puente de San Pablo y el Convenio de San Pablo. Todos estos rodeados de una magia especial y unas calles que evocan a otra época. Puedes conocer la historia de la ciudad y disfrutar de numerosos festivales medievales que se realizan en sus calles.

Estos elementos más todos los que descubrirás, hacen del casco antiguo de la ciudad la mejor ubicación para alojarse en un hotel

Quizás el elemento más distintivo de Cuenca. Muchas veces confundidas con el nombre de "casas colgantes".

Se desconoce con exactitud el origen de este elemento arquitectónico, aún así, se ha convertido en distinción indiscutible de la bella ciudad de Cuenca. Situadas en una cornisa de roca sobre la hoz del Huécar, solían poblar el paisaje del casco antiguo de la ciudad de Cuenca.

Ahora mismo solo quedan tres y entre ellas destacamos la casa de la Sirena, esta aloja un mesón con comidas típicas de la zona donde degustar la tradición conquense. Además, podemos encontrar las Casas del Rey, que alojan elementos sorprendentes como el Museo de Arte Abstracto Español.

El Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca posee durante todo el año una colección única de pinturas y esculturas de artistas españoles. Dichos artistas pertenecieron a la generación abstracta de los años 50-60.

Es un edificio medieval donde además se exponen de manera temporal otras colecciones de artistas contemporáneos.

Este puente de hierro construido en el año XX mantiene la estructura y estilo de la época. Situado en la hoz del Huécar, podemos encontrar a su lado el maravilloso Convento de San Pablo.

Si visitas Cuenca, no te puedes perder este maravilloso milagro de la ingeniería. Aunque lo que puedes encontrar es una réplica de la versión más antigua de piedra, seguro que no te decepciona.

El elemento más singular de la capital conquense. La Catedral de Cuenca, construida sobre la antigua mezquita árabe de la ciudad, de aire gótico perteneciente a la época de la conquista de Alfonso VIII.

Considerada la primera catedral gótica de Castilla y consagrada por San Julián, cuya imagen corona este maravilloso monumento de la ciudad.

Si visitas Cuenca, no puedes perderte el tour de la Catedral. Existe incluso la posibilidad de visitarla de noche.

Aquí te dejo un video para que te hagas una idea de su majestuosidad.

Si por algo se distingue el casco antiguo de la ciudad de Cuenca es por sus calles, rincones y entornos particulares. Esto da a pie a multitud de leyendas y cuentos que se formaron dentro del recinto de la ciudad. Muchas cuentan con un toque de magia y entorno místico que te enamorarán o te pondrán los pelos de punta.

Algunas de las historias que conocerás si te hospedas en un hotel de la parte antigua de Cuenca, serán la que habla de La Cruz del Diablo y la Fuente del Abanico.